Miércoles
de Ceniza 2021
MOTIVACIÓN PARA
CELEBRAR
Aunque en esta tarde todo parece igual hoy es una tarde
especial. Los coches seguirán aparcados en los mismos sitios de siempre. Las
madres harán sus compras como todos los días. Los médicos y enfermeras seguirán
atendiendo a sus pacientes. Los jóvenes y niños ocuparán los pupitres de
costumbre... Pero algo habrá cambiado a partir de hoy en muchos cristianos.
Muchos escucharán hoy una llamada para comenzar algo especial y diferente.
¿Sentís curiosidad?... ¿Sabéis a qué me refiero?...
Prestad atención: (Se muestra o se proyecta el cartel de la
Cuaresma).
Hoy comienza la Cuaresma es un camino que hacemos, durante
cinco semanas, para prepararnos a la celebración de la nueva vida que nos trae
Jesús resucitado: la Pascua. Pero la “Pascua” incluye también su pasión y su
muerte, porque la Pascua es todo: pasión, muerte y resurrección. Todos sabemos
que es un Smart, tenemos infinidad de dispositivos para comunicarnos. La
Cuaresma quiere activar en nosotros la comunicación con Jesús, conectar con él para
tener sus sentimientos. A lo largo de estos próximos cinco domingos iremos
conociendo cómo conectar con Jesús con un corazón nuevo. Tu corazón también es
un maravilloso dispositivo que puede entrar en conexión con Jesús: recárgate,
busca la cobertura, vacíate, ilumina y comparte.
Así nos saludamos con el signo de Jesús, es como el signo
que activa nuestra pantalla: su Cruz.
SALUDO INICIAL
Que la paz y el amor
del Señor estén con nosotros: Amén.
https://www.youtube.com/watch?v=NgyzpzdgUpE
Y comenzamos orando:
Querido Dios: Siento que me llamas por dentro y que me
invitas a salir. Sabemos que la Cuaresma es un camino que tenemos que hacer con
el corazón. Sabemos también que nos va a exigir algún esfuerzo. Hay que
actualizarse y eso significa dejar atrás lo que no sirve, apostar por lo que
nos hace más útiles y prestar un mejor servicio. Qué suerte que nos prometes un
corazón nuevo. Cuaresma es hacer del corazón un nuevo Smart.
ACOGEMOS LA PALABRA DE
DIOS
En este día, en nuestras celebraciones recordamos unas
palabras de Jesús con las que nos invita renovar nuestro corazón desde tres
actitudes: la verdadera oración, el verdadero esfuerzo y ayuno y la verdadera
ayuda: la generosidad con el necesitado
Evangelio según San Mateo
En aquel tiempo, Jesús
dijo a sus discípulos: “cuando des limosna, que no sepa tu mano izquierda lo
que hace la derecha, para que tu limosna quede en secreto; y tu Padre, que
conoce tus intenciones, te recompensará. Cuando hagas oración, no seas como los
hipócritas, a quienes les gusta orar de pie en las sinagogas y en las esquinas
de las plazas, para que los vea la gente. Yo os aseguro que así ya recibieron
su recompensa. Tú, en cambio, cuando vayas a orar, entra en tu cuarto, cierra
la puerta y ora ante tu Padre, que está allí, en tu interior; y tu Padre, que
conoce tu interior, te recompensará… Cuando ayunes, perfúmate la cabeza y
lávate la cara, para que no sepa la gente que estás ayunando, sino tu Padre,
que está en lo secreto; y tu Padre, que ve lo secreto, te recompensará’’.
Palabra del Señor.
REFLEXIÓN
Como veis la Cuaresma nos invita a cuidar tres signos que
renuevan nuestros deseos y proyectos de ser mejores: la verdadera ayuda, el
verdadero esfuerzo y ayuno y la verdadera oración. En la Iglesia tenemos el
gesto que hoy renovamos para expresar que queremos un corazón nuevo, es recibir
la cruz de Jesús como una marca con ceniza.
La ceniza es un polvillo que queda cuando algo se ha quemado
del todo, pero a la vez es el signo de volver a comenzar de nacer de nuevo. Y
es que somos como polvo, como tierra, como ceniza. En la Biblia, precisamente,
Dios hace al ser humano del barro, que es lo que, en realidad, somos. Pero Dios
sopla su aliento de vida a ese barro y, gracias a ese aliento, el ser humano
vive. La ceniza significa eso: que somos como barro, como ceniza, pero una
ceniza a la que Dios hace vivir. Sin Él no seríamos nada. Por eso, al comenzar
el camino de la Cuaresma, se nos pone ceniza en la frente para que nos
acordemos de que, sin el soplo de Dios, sin su aliento, no podemos llevar a
cabo esta carrera Cuaresmal. La ceniza que recibimos este día es como un signo
que representa nuestro deseo de actualizarnos y sintonizar con Jesús. Cuando la
recibas vas a escuchar el primer mensaje de Jesús: Conviértete y cree en el
evangelio, cada uno en ese momento de recibirla decimos: Amén
Mientras escuchamos esta canción con la que pedimos al Señor
un corazón nuevo:
(Se espolvorea la ceniza con la señal de la cruz)
https://www.youtube.com/watch?v=JmHZguzy3YI&list=RDJmHZguzy3YI&start_radio=1&t=0
El Padrenuestro es la expresión del nuevo corazón, corazón
de hermanos en Jesús, a Él le pedimos aprender a orar, a partir el pan y a
esforzarnos en hacer su voluntad, y oramos diciendo: Padre nuestro…
ORACIÓN FINAL
Que el día de ayuno con el que iniciamos, Señor, esta
Cuaresma sea el principio de una verdadera conversión a ti, y que nuestros
actos de penitencia nos ayuden a tener un corazón nuevo, renovando nuestra
vida. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Amén
Comencemos este camino a la Pascua de Jesús, con alegría e
ilusión. Vayamos en paz.
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